MATEO 22: 11-14
¨Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda. 12 Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció. 13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. 14 Porque muchos son llamados, y pocos escogídos¨.
INTRODUCCION:
William Barclay describe en su comentario que el versículo dice ¨porque muchos son invitados, pero pocos son seleccionados¨. Dice Barclay que esta es una parábola distinta, pero es una continuación y una ampliación a la anterior que se encuentra en Mateo 22:1-10; y esta parte que describe Mateo 22:11-14 habla de un invitado que no entro adecuadamente vestido a la boda, Jesus toma una historia que ya le era familiar a Sus oyentes para Su propio fin, pues los rabinos tenían dos historias a cerca de reyes y ropa; la primera hace referencia ha un rey que invito a sus cortesanos a la fiesta sin decirles la hora ni la fecha pero les advirtió que debían lavarse, ungirse para la fiesta y estar listos, ellos no fueron prudentes y se fueron a sus labores, el dia llego y ellos no estaban listos así que solo los prudentes tuvieron el privilegio de asistir y los demás quedaron afuera tristes. ¨Esta parábola rabínica habla de la obligación de estar preparados para la llamada de Dios, y la ropa de boda representa la preparación que debemos hacer¨ (Barclay, 1999); y una segunda parábola trata de los vestidos reales que el rey confió, pero llegado el dia los prudentes le entregaron la ropa limpia al rey mientras que los insensatos las usaron para ir a su trabajo y la ensuciaron así que llego el dia cuando reclamo sus ropas y se la entregaron sucias. Así será el dia en que al devolver su alma a Dios se debe entregar en toda pureza y que la persona que devuelva un alma sucia será condenada. ¨Uno no puede seguir viviendo como vivía antes de convertirse al Señor debe vestirse de una nueva pureza y santidad¨ (Barclay, 1999)
Aplicándolo hoy dia no podemos ser vestidos en santidad en nuestras propias fuerzas, pues despreciaríamos el vestidos real que Dios nos ha dado para vivir la vida abundante que el nos ha prometido, ese vestido es LA PERSONA DEL ESPIRITU SANTO, Dios por medio de Su Hijo Jesucrtisto, nos abrió camino a una comunión directa con El Espiritu Santo y así tener el poder para vencer el tentación.
Este el momento de vivir en santidad empieza una amistad con EL ESPIRITU SANTO y así serás mas que vencedor en Cristo Jesus.
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